PESQUERÍA, N.L.- El alto nivel de automatización y el sistema de producción de KIA Motors México le permite tener listo un vehículo cada 53 segundos, logrando una producción diaria de 900 unidades en su planta localizada en este estado norteño, siendo la única que tiene una operación completa de un vehículo, de acuerdo con Víctor Alemán, Institutional Relations & Legal Senior Manager de la automotriz.
KIA abrió a la prensa especializada las puertas de su planta en Pesquería, que inició operaciones en mayo de 2016, con un área de 500 hectáreas, teniendo una capacidad instalada de 400 mil vehículos por año, lo que representa el 12% de la producción global de la marca surcoreana.
A casi siete años de iniciar producción, KIA se ha colocado como una de las marcas referentes del mercado mexicano, posicionándose como la quinta marca con más ventas en el periodo de enero a abril de 2023, con el 7.5% de participación en los 412 mil 736 vehículos comercializados en el país, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
La compañía se destaca porque en el corto tiempo que lleva en México se coloca en los primeros cinco lugares en participación de mercado, considerando marcas de más de 50 años de experiencia en el mercado mexicano, con redes de concesionarios más grandes y consolidadas”, destacó Víctor Alemán.
La estrategia de producción de KIA Motors comenzó desde la construcción de la planta, ya que pudo incorporar dentro del mismo parque a 12 de sus principales proveedores de primer nivel de los componentes que utiliza en el proceso.
“La gran ventaja que tiene nuestro complejo, en comparación con otra operación, es que la proveeduría de primer nivel se encuentra en esta misma ubicación, algo que en otras operaciones no ocurre, lo que implica movimientos, maniobras, empaques, desempaques, tiempos, incluso mermas, entonces esta es una ventaja”, aseguró Alemán.
Destacó que esta planta también cuenta con una estructura de conveyors que alimenta a la planta de los componentes prácticamente en tiempo real y de manera secuenciada para utilizarlos en la manufactura de los dos modelos que se fabrican en esta ubicación: Forte y Rio.
KIA automatizado
El proceso de producción de estos vehículos que únicamente se fabrican en territorio mexicano es 75% automatizado y comienza en la recepción de las láminas de acero, que provienen de proveedores como Ternium.
Estas láminas pasan a través de unas prensas de tres metros en las que se golpea el acero para darle la forma de cada componente con un troquel, que son llevados a la prensa a través de una grúa.
Cabe destacar que las tres prensas que incorporó la compañía para este proceso cuentan con un sistema de suspensión para que los golpes no provoquen vibraciones en el inmueble.
Una vez que las puertas, cofres, techos, etc., están terminados, unos robots los alojan en racks dependiendo el modelo, para pasarlos a través de los conveyors al siguiente paso de la operación que es la soldadura.
En este espacio hay una mayor participación de los robots, con 450 robots de soldadura, que va incorporando los componentes hasta formar la estructura del vehículo, para después pasar a una etapa de inspección, que verifica que todo el proceso de soldadura no tenga errores.
Posteriormente, esta estructura pasa a pintura, un área totalmente hermética, que cuenta con sistemas de cascadas y aire para evitar que cualquier partícula entre y dañe la pintura.
La estructura continúa por los conveyors del inmueble para llegar a la siguiente etapa, en la que se le instalan a la unidad aproximadamente 30 mil componentes.
Este sistema es totalmente secuenciado, es decir, las piezas que se le van a colocar a cada estructura están acomodadas dependiendo el destino de cada vehículo, ya que cumplen especificaciones diferentes dependiendo del país al que se exportará.
Para evitar cualquier daño, en esta etapa las puertas de la unidad son removidas y son equipadas en otro proceso, entonces, la estructura pasa por bandas viajeras, en donde los componentes, como la facia, el tablero, el tanque de gasolina, etc., son instalados manualmente por los colaboradores de KIA hasta llegar al tren motriz y el chasis.
Por último, los vehículos terminados son llevados a la pista de prueba de aproximadamente cuatro kilómetros, en la que los expertos de KIA evalúan la unidad, verificando que no haya ningún problema en cuanto a ruidos o vibraciones.
“Todos los vehículos que son producidos en esta planta pasan por ese proceso de verificación de calidad, en el que se checan conceptos de ruidos, vibraciones o cualquier imperfección que pueda resultar. Tenemos muy poca incidencia de defectos, que se debe a que tenemos una muy intensa labor de calidad al final de cada uno de los procesos”, aseguró Alemán.
Las unidades son exportadas principalmente al mercado estadounidense, por lo que son llevadas en madrinas hacia un punto de distribución para transportarlas principalmente por ferrocarril.
La planta en Pesquería produjo 266 mil unidades en 2022, números que poco a poco se van acercando a niveles prepandemia, por lo que este año prevén una producción similar.
Fuente: t21.com.mx
