La economía del Paraguay que se destaca por la macroeconomía estable, ha sufrido un golpe a finales del año 2021 y principios del 2022 debido a la grave sequía que afecto en forma directa al campo y a la suba del combustible que deriva en la suba de todos los productos y servicios en el mercado local.
El experto analista económico Amilcar Ferreira dijo en conversación con Paraguay Fluvial que al inicio del presente año se tenían expectativas positivas con respecto al 2022.
“En lo sanitario va a ser el año en el que damos por terminada la pandemia probablemente en el mundo, pero a finales del 2021 vino el golpe de calor y sequia que tuvo un impacto muy fuerte en un momento sensible para la agricultura por que es el momento en el cual la soja está en pleno proceso de crecimiento de las raíces y la falta de lluvia genero un impacto negativo superior al 60% según informaciones que manejamos, con lo cual vamos a tener una mala cosecha”. Afirmó.
Agregó que debido a estas condiciones vamos a tener un sustancial menor ingreso de divisas en el mercado que superan los USD 2.000 millones que dejarían de ingresar lo que tendría un efecto en el tipo de cambio y por otro lado el efecto inflacionario que es otra variable macroeconómica que tampoco da tregua en estos momentos.
“Cerramos el 2021 con una inflación de 6,8%, Paraguay tiene un esquema de meta de inflación, donde la inflación objetivo es del 4%. Es la primera vez desde el año 2011 donde se implementó un esquema de metas que el Banco Central” sentenció.
En otro momento dijo que el petróleo sufre consecuencias debido a condiciones de ofertas y demandas con la vuelta a la normalidad de las actividades a nivel global, además de la tensión geopolítica entre Ucrania y Rusia.
“Creemos que esta condición podría ir mejorando a partir del segundo semestre del presente año ya con un petróleo mas estable y la posible solución al conflicto entre Rusia y Ucrania” afirmó.
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