En el Día Mundial de los Océanos, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha pedido medidas “urgentes y coordinadas” para “liberar” a los marinos atrapados a bordo de barcos en todo el mundo debido a las medidas para contener la COVID-19. La organización calcula que hay entre 150 000 y 200 000 personas afectadas.
La OIT ha instado a los gobiernos, a las autoridades de inmigración, de salud y marítimas a trabajar juntos para reconocer a la gente de mar como “trabajadores clave” que aseguran el flujo comercial y el tráfico de suministros médicos vitales, equipos de seguridad, alimentos y otros bienes clave durante la pandemia. Por ello, ha pedido a los gobiernos que adopten sin demora todas las medidas posibles para facilitar los cambios de tripulación y la repatriación de la gente de mar, mientras se toman medidas para minimizar el riesgo de contagio. Pero, “desde que a finales de abril, la OIT advirtiera sobre la difícil situación de la gente de mar a la que se le denegó el permiso para abandonar sus barcos, los logros han sido limitados” y, según la OIT, “la situación empeora día a día”.
“Muchos de los que estaban a bordo completaron su turno de servicio hace más de cuatro meses, pero se les ha extendido el contrato excepcionalmente debido a la crisis, y ahora se informa de que muchos están experimentando problemas de salud mental y agotamiento físico, lo que está reduciendo su capacidad para llevar a cabo sus tareas de manera segura”, explica la OIT. “Forzar a la gente de mar agotada a seguir trabajando más de cuatro meses después del final de su contrato es inaceptable. Esto pone en peligro su salud y la seguridad marítima. Hacemos un llamamiento a los gobiernos para que trabajen juntos para que se puedan realizar los cambios de tripulación con seguridad”, explica Guy Ryder, director general de la OIT.
La solicitud de la condición de trabajador clave para la gente de mar se subrayó en una declaración conjunta emitida el 22 de mayo por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), la Organización Marítima Internacional (OMI) y la OIT que eximía a la tripulación de las restricciones de viaje y facilitaría su incorporación o salida de los barcos.
Fuente: Industrias Pesqueras