El aterrizador lunar chino Chang’e 5 ha realizado una hazaña histórica: el dispositivo se ha convertido en el primer en detectar agua en la Luna en tiempo real.
Con la ayuda de un instrumento que detecta agua mediante la determinación de mediciones de reflectividad espectral del regolito (suelo) y las rocas lunares, la misión china pudo encontrar agua en su lugar de aterrizaje en la cuenca Procellarum, en la cara visible de nuestro satélite natural.
Antes de Chang’e 5 ninguna misión lunar había encontrado agua en tiempo real en la superficie lunar, subrayó el portal Space. En la década del 70 del siglo pasado, los astronautas de la misión estadounidense Apolo tomaron muestras lunares que contenían agua, pero el líquido no se detectó hasta décadas más tarde en laboratorio, tras un avance tecnológico de los dispositivos de investigación.
El agua en la Luna también ya se había detectado anteriormente desde la órbita del cuerpo celeste. Los científicos de la India lo hicieron por primera vez en el marco de la misión Chandrayaan-1 con la ayuda del Mapeador de Mineralogía Lunar de la NASA. Los hallazgos indios se anunciaron el septiembre de 2009 y, desde entonces, el agua se ha registrado extensamente desde la órbita por otras misiones, como la del Lunar Reconnaissance Orbiter de la agencia espacial estadounidense.
La tardanza en encontrar agua en la Luna se debe, en parte, a que ocurrió un largo intervalo en las misiones lunares de superficie. Antes de la iniciativa Chang’e 3 en 2013, el último alunizaje controlado había ocurrido 37 años antes, en la misión Luna 24 de la Unión Soviética.
La cantidad de agua encontrada recientemente por China en la Luna no es grande. Se trata de aproximadamente 120 partes por millón en el regolito y 180 partes por millón en una roca ligera, detalló el portal especial citando a los científicos de la Academia China de las Ciencias.
Los hallazgos de la misión china se confirmaron a través de un análisis de una muestra del regolito lunar traído por Chang’e 5 a la Tierra el diciembre de 2020. La sonda fue la primera en traer material de la Luna desde la última misión soviética en 1976.
«Esta [proporción de agua] es consistente con el análisis preliminar de las muestras traídas por Chang’e 5», informaron los oficiales chinos a través de un comunicado de prensa.
El agua en la superficie lunar se atribuye a la deposición del viento solar, es decir, el flujo constante de partículas cargadas provenientes del Sol. Sin embargo, el origen de la roca lunar podría ser más complejo y su agua probablemente provino del interior lunar.
Al analizar la composición de la roca y compararla con la detección remota desde la órbita se descubrió que «la roca puede haber sido excavada de una unidad basáltica más antigua y expulsada al lugar de aterrizaje de Chang’e 5», dijeron los investigadores chinos.
«Por lo tanto, el menor contenido de agua del suelo, en comparación con el mayor contenido de agua del fragmento de roca, sugiere que se produjo la desgasificación del depósito del manto debajo del lugar de aterrizaje de Chang’e 5», detalló el comunicado.
El descubrimiento de agua en la superficie también es consistente con erupciones volcánicas, las cuales también habrían transportado agua, en la región de Procellarum, explicaron los científicos.
En los últimos años, China ha llevado a cabo diversas exitosas misiones lunares. El noviembre de 2020, por ejemplo, la misión Chang’e 4 cumplió 1.000 días en la cara oculta de la Luna; fue la primera misión de este tipo en aterrizar allí. Para el 2024, el país asiático planea recolectar muestras en esta región poco explorada de nuestro satélite natural en el marco de Chang’e 6.