El Gobierno español reclama 855 millones de euros a la aseguradora del barco petrolero, The London Steam-Ship Owners Club. El juez del caso, Nigel Teare, califica la disputa de llamativa y compleja.
La posibilidad de que España recupere parte de los costes por el hundimiento del Prestige en 2002 está en manos de Nigel Teare, el juez del Tribunal Comercial británico que va a dirimir un pleito entre el Gobierno de Sánchez y la aseguradora del buque petrolero.
La Administración española, representada por el bufete Squire Patton Boggs, quiere que la Justicia británica ejecute una sentencia del Tribunal Supremo español de 2016, donde se declaraba a la aseguradora The London Steam-Ship Owners Club como responsable de pagar los 855 millones de euros de cobertura máxima contemplada en la póliza del barco.
Pero esta compañía, conocida en Londres como The London P&I Club y asesorada por el despacho Ince Gordon Dodds, rechaza esa petición argumentando que en 2013 un laudo arbitral en Londres determinó que no tenía que entregar indemnización a España, ya que el dueño del barco no había pagado las cuotas del seguro.
Un juez ratificó esta decisión.
En un auto para definir las fechas y condiciones del juicio, Teare califica la disputa de «llamativa» y «compleja». Según explica, «España quiere ejecutar una decisión del Tribunal Supremo español en Inglaterra en circunstancias donde un juzgado inglés ha determinado que el árbitro, que concluyó que The Club no tenía responsabilidad ante España, tenía jurisdicción para tomar una decisión contra España».
Esta resolución preliminar del juez Teare deja claro que la ejecución de la sentencia del Supremo va a estar lejos de ser una simple formalidad.
El magistrado está dispuesto a reabrir algunas de las cuestiones clave del proceso. Por ejemplo, quiere oír testimonios sobre cómo se realizó la investigación del hundimiento del Prestige, para ver si la aseguradora contó con información adecuada para defenderse durante el proceso.
La audiencia del juicio queda fijada para el mes de diciembre de 2020. Antes de ello, entre febrero y julio, las dos partes podrán ir enviando al juez sus argumentos y pruebas.
El Club pretendía que la vista se retrasara hasta febrero de 2021. Fuentes jurídicas señalan que el Brexit puede jugar un papel importante en el procedimiento. Si no hay un acuerdo en materia judicial entre Reino Unido y la UE al final del periodo transitorio en diciembre de este año, las sentencias en países europeos dejarán de ser ejecutadas de forma inmediata en la jurisdicción británica, y viceversa.
Sin embargo, otros expertos indican que casos como el del Prestige, ya en marcha, no deberían verse afectados por el Brexit. Todo dependerá de la visión del juez Teare.
LOS PROTAGONISTAS DEL PLEITO
Lionel Persey (abogado representante del Gobierno español). Lionel Persey es el ‘Queen Counsel’ (abogado de máxima categoría) que defenderá la posición española ante el juez, instruido por el bufete Squire Patton Boggs. Trabaja desde 1982 y se ha especializado en disputas en asuntos marítimos, energéticos y de seguros. En ocasiones, también ejerce como árbitro en conflictos mercantiles.
Nigel Teare (juez del Tribunal Comercial de Reino Unido). El juez Nigel Teare es magistrado en los tribunales británicos desde 2006. Antes trabajó como ‘Queen Counsel’. Está a cargo del Tribunal Comercial de Londes desde hace dos años. Entre 2000 y 2006, fue encargado de los arbitrajes en disputas entre miembros del mercado de seguros Lloyd’s of London. Estudió en King William’s College y en Oxford.
Christopher Hancock (abogado representante de The London P&I Club).El bufete Ince Gordon Dodds ha encargado a Christopher Hancock la presentación de los argumentos de The London P&IClub ante el juez. Este ‘Queen Counsel’ ya trabajó con esta firma en 2013, para defender en los juzgados el peso de un laudo arbitral que descartaba la responsabilidad de la aseguradora en el caso del ‘Prestige’.
Antecedentes
El desastre del Prestige fue un derrame de petróleo en Galicia provocado por el hundimiento del buque petrolero Prestige en 2002. El accidente afectó a 2000 kilómetros de costa española, francesa y portuguesa.
El 13 de noviembre de 2002, el petrolero monocasco Prestige se accidentó en una tormenta mientras transitaba cargado con 77 000 toneladas de fuelóleo frente a la Costa da Morte, en el noroeste de España. Tras varios días de maniobra para su alejamiento de la costa gallega, se acabó hundiendo a unos 250 km de la misma. El vertido de la carga causó una de las catástrofes medioambientales más grandes de la historia de la navegación, tanto por la cantidad de contaminantes liberados como por la extensión del área afectada, una zona comprendida desde el norte de Portugal hasta las Landas de Francia. El episodio tuvo una especial incidencia en Galicia, donde causó además una crisis política y una importante controversia en la opinión pública.
Fuente: expansion.com