La Organización Marítima Internacional (OMI) solicitó a las partes interesadas, incluidos armadores y organizaciones como Bimco, que proporcionen aportes a la fase de creación de experiencia (EBP) diseñada para ver cómo está funcionando la Convención BWM, que es un convenio internacional de 2004 para el control y la gestión del agua de lastre y sedimentos de los buques.
Desde septiembre de 2017, todas las naves han tenido que gestionar su agua de lastre para que los organismos acuáticos y los patógenos se eliminen o se vuelvan inofensivos antes de que el líquido se libere en una nueva ubicación. Esto ayuda a prevenir la propagación de especies invasoras y patógenos potencialmente dañinos.
El proceso de recopilación y análisis de datos está diseñado para identificar aspectos de la implementación de la Convención que están avanzando como se requiere, y para mejorar aún más los aspectos que no funcionan.
Fuente: Por Redacción PortalPortuario.cl