- El portavehículos Galaxy Leader ha sido secuestrado por los hutíes de Yemen
- El grupo, apoyado por Irán, lo enmarca en el contexto de lo ocurrido en Gaza
- El carguero había sido fletado por la empresa japonesa Nippon Yusen
El secuestro este fin de semana en el Mar Rojo de un buque carguero israelí fletado por Japón por parte de los rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán, hace temer que la guerra entre Israel y Hamás provoque interrupciones del transporte marítimo en la región.
La empresa Nippon Yusen, con sede en Tokio, ha informado de que el Galaxy Leader, un portavehículos fletado por ella, fue apresado este domingo en el sur del Mar Rojo. La empresa desconoce el paradero actual del buque, que cuenta con una tripulación de 25 personas y no transporta carga, ha declarado un portavoz, recoge Bloomberg.
Galaxy Leader es propiedad de una unidad de Ray Shipping Group, del empresario israelí Rami Ungar. La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha condenado el secuestro. Un portavoz de los hutíes declaró este domingo que seguirán atacando barcos israelíes hasta que finalice la operación militar contra Hamás.
El incidente suscita preocupación por los riesgos en una de las rutas marítimas más transitadas del mundo. Los ‘fantasmas’ de las interrupciones por el covid y de episodios como el atasco del Evergreen en el Canal de Suez o los problemas que ha habido en el Canal de Panamá aún permanecen cercanos.
Mientras que el impacto del conflicto de Oriente Medio se ha limitado a la congestión en los puertos israelíes, la acción en el Mar Rojo representa una «escalada significativa de las tensiones» en la región en general, valora Kenneth Loh, analista de Bloomberg Intelligence que cubre el transporte marítimo y la logística.
«Es posible que algunas compañías navieras decidan evitar la región por motivos de seguridad, lo que supondría costes y retrasos adicionales», señala. «Esto podría provocar un efecto dominó en todas las cadenas de suministro mundiales que recuerde a la congestión y el caos de la cadena de suministro de la época de la pandemia».
El Ministro de Comercio japonés, Yasutoshi Nishimura, ha declarado que la ruta del Mar Rojo se utiliza para el transporte de diversas mercancías y que los problemas que allí se plantean podrían afectar a la economía del país. También ha dicho que, aunque no hay un impacto inmediato, Japón está observando cualquier efecto en las cadenas de suministro y la inflación con un sentido de urgencia.
Este lunes, el Secretario Jefe del Gabinete, Hirokazu Matsuno, ha afirmado que el gobierno japonés está recopilando información a través de los ministerios y organismos pertinentes. El país se está comprometiendo con el gobierno israelí, así como con los hutíes, Arabia Saudí, Omán e Irán para trabajar hacia la liberación del buque, ha añadido.
Los tripulantes del buque proceden de Bulgaria, Ucrania, Rumanía, México y Filipinas, según el portavoz de Nippon Yusen. El barco había descargado su carga en un puerto de Turquía y se dirigía a la terminal de Pipavav, en la costa de la India. Nippon Yusen aún no ha decidido las medidas que tomará con otros buques que puedan pasar por la región del Mar Rojo, ha reconocido el portavoz.
Fuente: eleconomista.es