Falta de previsión, de inversión y de operatividad. Los operadores del mercado resumen de esa manera el estado de situación para las funciones del Puerto de Buenos Aires, que lo habrían convertido así en un “puerto obsoleto”. El riesgo que señalan es que esa falta de inversiones pueda hacerle perder mercado a la Argentina en favor de Uruguay y Brasil.
“La falta de un plan de infraestructura nacional a largo plazo, producto quizás de las llamativas renovaciones sistemáticas de su concesión justificaron la ausencia de inversiones. De esta forma, condicionaron al principal puerto de contenedores de Argentina, que centraliza el 50% del total de la carga, a convertirse en una terminal carente de tecnología, equipamiento y operatividad”, mencionó una fuente del sector.
Uno de los ejemplos con que grafican ese contexto crítico es la capacidad operativa del puerto. “Entre otras consecuencias, la ausencia de una idea o proyecto de infraestructura portuaria se volvió directamente proporcional a la falta del calado necesario para el ingreso de grandes buques”, mencionaron.
“Esto no sólo sitúa a nuestro país en una posición desfavorable frente a Uruguay y Brasil sino que aumenta el riesgo de que el puerto se convierta en un puerto secundario o ‘feeder’, es decir de menor competitividad ya que implica mayor tiempo de navegación hacia los principales mercados de exportación”, plantearon fuentes del sector.
“El impacto negativo producto de esta sucesión de decisiones, lo es también para la ciudad. Por su ubicación y centralidad en un solo punto provoca un embudo que ocasiona una gran congestión urbana, costos logísticos extras y contaminación exponencial a la que se enfrentan ciudadanos y turistas a diario”, aseguran.
En ese sentido, una propuesta que circula es la de “descentralizar” la actividad del puerto, de manera tal de que algunas funciones sean realizadas desde otros puntos del país. “La principal idea para descentralizar la actividad portuaria en Buenos Aires es relocalizar la actividad en otros puertos, logrando una mejor distribución de los contenedores”, menciaron.
En ese sentido, listaron:
-Exolgan: Ubicado en Dock Sud, es un puerto cercano a CABA, cuenta con un predio de 60 hectáreas y con capacidad para 1 millón de teus (Twenty-foot Equivalent Unit, unidad de medida utilizada en el comercio exterior para calcular la capacidad de carga).
-TecPlata:, a sólo 45 minutos de la ciudad de Buenos Aires, es la única terminal preparada con un muelle que puede alcanzar los 14 metros de profundidad de calado. Cuenta con un equipamiento portuario de última generación que apuntala un plan de desarrollo para superar el millón de teus de capacidad.
-Terminal Zárate: en Campana, cuenta con más de 218 hectáreas y 300 mil teus de capacidad, es el primer puerto de Latinoamérica diseñado para trasladar vehículos, además de contenedores y cargas generales.
-Tajiber: Ubicada en el km 92 de la margen derecha del Río Paraná de Las Palmas, cuenta con un total de 280 hectáreas, 1000 metros de muelle con 35 pies de calado para buques oceánicos, feeders y barcazas, optimizando la logística en la Hidrovía Paraguay-Paraná.
“El plan estratégico para descongestionar la zona del puerto de Buenos Aires es unir las locaciones mencionadas en un camino paralelo que se construiría bordeando a la actual ruta 6. Estas modificaciones permitirían mejorar la matriz de costo logístico, tiempos operativos, seguridad de la carga y generar nuevos puestos de empleo. Otro foco importante es que se podrían utilizar camiones biten para no influir negativamente en el tránsito y obtener mayor capacidad por vehículo”, reza la propuesta.
“Como resultado, la descentralización trae consigo un reordenamiento urbano en la zona portuaria que le permite al tránsito pesado atravesar la ciudad utilizando el paseo del bajo, reduciendo la congestión, el impacto ambiental y mejorando la calidad de vida de los habitantes y quienes la visitan. A futuro, en el espacio ganado por la relocalización se podrán construir hoteles, espacios públicos, centros comerciales y de convenciones, así como una nueva terminal de cruceros, un cambio urbanístico que atraería inversiones por 6 mil millones de dólares y podría generar más de 3.000 puestos nuevos de trabajo en un período de 10 años”, concluyeron.
FUENTE: INFOBAE