La Cancillería Nacional de Paraguay anunció la expulsión del diplomático Xu Wei, de la República Popular China, tras considerar que su accionar representaba una injerencia en los asuntos internos del país. En un comunicado publicado en su cuenta oficial en X (anteriormente Twitter), la Cancillería informó que se canceló la visa del funcionario y se le otorgó un plazo de 24 horas para abandonar el territorio paraguayo.
Xu Wei formaba parte de la delegación china que participó en la 19° Sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco, evento que reunió a 150 delegaciones internacionales en Asunción. Sin embargo, el diplomático generó controversia al acudir al Congreso Nacional, donde buscó reunirse con el presidente de la Cámara de Diputados, Basilio Núñez, y otros legisladores. Durante su visita, ofreció declaraciones públicas instando a Paraguay a romper relaciones diplomáticas con Taiwán, en favor de establecer vínculos con la República Popular China.
La embajada de Taiwán en Paraguay reaccionó enérgicamente, calificando las declaraciones de Xu Wei como un intento de “socavar la firme amistad entre Paraguay y Taiwán con la falacia de ‘una sola China’”. En su comunicado, el gobierno taiwanés destacó su rechazo hacia las acciones del diplomático chino, a quien acusó de infiltrarse en Paraguay con fines desconocidos.
La situación surge en un contexto de tensiones globales sobre la política de una sola China, en la que Beijing busca consolidar su posición como único representante legítimo del pueblo chino, mientras Taiwán mantiene relaciones bilaterales con una selecta lista de países, entre ellos Paraguay.
Esta medida del gobierno paraguayo refuerza su postura de respaldo a Taiwán, con quien mantiene una histórica alianza diplomática y económica. Entretanto, la sesión de la Unesco prosigue con su agenda para la preservación del patrimonio cultural inmaterial, aunque ensombrecida por este incidente diplomático.