La Hidrovía Paraguay-Paraná, uno de los corredores fluviales más importantes de Sudamérica, enfrenta una crisis no solo provocada por la bajante extrema del río, sino también agravada por la desidia y el comportamiento fraudulento de directivos de PDVSA Argentina. Bajo la gestión de Carlos Corredor y Diego Capraro, presidente de Naviera Conosur S.A., las decisiones negligentes y unilaterales han causado múltiples problemas y hasta afectando a la flota y al comercio internacional, Carlos Corredor se presentó en Asunción y revocó de manera unilateral y sin cumplir con lo establecido en las leyes del Paraguay, un contrato afectando el comercio y logrando la detención de la flota compuesta por 2 remolcadores y 12 barcazas que hacían transporte de material en la ruta Paraguay – Brasil, mientras se busca la devaluación de activos presuntamente para beneficios personales.
Negligencia y colapso operacional: Un plan orquestado para la devaluación de activos
A pesar de las repetidas alertas meteorológicas emitidas por las autoridades de Argentina y Paraguay debido al descenso crítico de los niveles del río, las empresas navieras vinculadas a PDVSA Argentina, como Naviera Conosur S.A., ignoraron por completo las recomendaciones, lo que resultó en el encallado de dos remolcadores y 12 barcazas. La falta de acción por parte de Capraro ante las advertencias de la Prefectura General Naval Paraguaya dejó a una de las embarcaciones, el remolcador Orgullo, con daños estructurales irreversibles según informaciones.
En otras publicaciones, este medio ha denunciado el abuso de poder cometido por Diego Capraro contra el plantel de colaboradores que todavía trabaja en las empresas Fluvialba Paraguay y Naviera Conosur, situación que se mantiene y que afecta incluso a las familias. Según denuncian, los mismos se ven obligados a someterse a las exigencias de largas horas de trabajo mientras Diego Capraro, trabaja desde un hotel 5 estrellas donde tiene más de un año hospedado.
Del mismo modo, hemos denunciado, basados en información e investigación recabada, que la única intención de este grupo de venezolanos conformado por Carlos Corredor como cabecilla, Lay Higuera Frank como su asesora y operadora en Venezuela y Diego Capraro como el operador en la región, sería buscar reducir el valor de los activos de las empresas ofreciendo en venta las mismas a un costo irrisorio pero beneficioso para ellos dada la comisión que recibirían de avanzar en la venta de las empresas y en su defecto, su otra misión es hacer entrega de los activos restantes de las empresa al gobierno norteamericano. Esta afirmación se desprende a razón de la información recibida por sindicatos que hacen vida en la hidrovia e informan que el Comandante del Área Naval Fluvial (ANFL) y Jefe de la Base Naval Zárate, Contraalmirante Daniel Francisco Finardi, recibió la visita de una comitiva estadounidense a cargo del Comandante de Operaciones Especiales Sur de los Estados Unidos de América, Contraalmirante Mark A. Schafer.
Investigaciones y denuncias revelan que la intención de este grupo directivo no es solo negligencia operativa, sino una estrategia deliberada para devaluar los activos de las empresas. Carlos Corredor, junto a sus colaboradores Lay Higuera Frank y Diego Capraro, han mantenido las embarcaciones de PDVSA en condiciones de abandono, hundidas o inutilizadas, permitiendo que se encallen y afecten incluso una zona clave para el amarre de embarcaciones, habiendo resoluciones de Prefectura General Naval que ordena tomar todas las acciones necesarias para evitar el encallamiento de embarcaciones considerando el impacto operativo y ambiental que generan.
Relaciones internacionales y cooperación cuestionada
La reciente visita de una comitiva estadounidense, encabezada por el Contraalmirante Mark A. Schafer, a la base naval de Zárate en Argentina, ha levantado sospechas de una posible entrega de activos de PDVSA a intereses extranjeros. Sindicatos y operadores judiciales de la región apuntan a que las acciones de Corredor y Capraro, lejos de proteger los intereses de PDVSA, están destinadas a facilitar la expropiación y venta de los activos a precios irrisorios.
La información fue publicada el martes 27 de agosto 2024 por Gaceta Marinera; el medio oficial de prensa de la Armada Argentina.
Según dice Gaceta Marinera; “la delegación inició la jornada con una exposición a cargo de los Jefes de Operaciones del ANFL y del Batallón de Infantería de Marina N° 3 “Alte. Eleazar Videla” (BIM3), quienes abordaron las funciones y tareas que se cumplen en esta zona naval y sus unidades subordinadas”.
Se supo que los militares extranjeros navegaron por el Paraná, conocieron las condiciones del canal de navegación y constataron el hundimiento de 7 barcazas propiedad de PDVSA ARGENTINA en el lecho del rio por el sector el Rosario provincia de Santa Fe Argentina.
Dicha jornada finalizó “con una reunión del Contraalmirante Schafer y el Contraalmirante Finardi, donde dialogaron sobre futuras actividades e intercambiaron presentes”.
Según información suministrada por miembro de la Federación Judicial Argentina con sede en Buenos Aires, el Contraalmirante Mark A. Schafer y funcionarios de la embajada del país norteamericano se reunieron con el Presidente de PDVSA Argentina empresa filial de Petróleos de Venezuela señor Carlos Corredor, en donde se ratificaron los acuerdos de cooperación suscritos por este.
En esa oportunidad el presidente de PDVSA Argentina señor Carlos Corredor, asumió la vocería por las empresas del holding petrolero Venezolano que funcionan en la Hidrovia, explicando las razones por la que las empresas se encuentran en quiebra y sin funcionamiento, constatando en dicha reunión que la flota perteneciente a las empresas se encuentran fuera de servicio, muchas de las embarcaciones están encalladas y otras tantas hundidas desde hace años, siendo informado de las medidas judiciales que se invocaran en contra de las empresas a ser expropiadas por estar en abandono total.
Directivos regionales de la Federación Judicial Argentina, pudieron constatar que existen más de 200 expedientes judiciales, donde se encuentra como demandada PDVSA Argentina o algunas de sus filiales, con una cuantía que supera los USD 10.000.000, muchas de esos expedientes han sido sentenciados en contra de PDVSA, siendo la causa principal y común en los expedientes actuales desde mediados del 2023, la indefensión que ha tendido la empresa o en otros casos la falta de atención a los expedientes judiciales que hacen perdedores a las empresas filiales de PDVSA en la región, presentando, según el gremio judicial, una conducta que ha facilitado la quiebra de las empresas dirigidas por Carlos Corredor y bajo la supervisión legal de la abogada Lay Higuera Frank.
Señalan directivos del equipo de Juan Carlos Schmid, que mientras otras operadoras buscaron proteges sus embarcaciones, la flota de PDVSA Argentina tiene más de 3 años sin que sus embarcaciones fueran movilizadas, muchas de ellas están hundidas o en proceso de hundimiento, sin que sean atendidas por algún funcionario de PDVSA, llegando a afectar el canal de navegación de la hidrovia, esta situación ha sido denunciadas por la comunidad de San Lorenzo provincia de Santa Fe, donde existen mas de 30 embarcaciones en condición de abandono.
Indica el directivo, que en Paraguay ocurre la misma situación y que sindicatos adscritos a la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina, han recibido múltiples denuncias contra el actual presidente de las empresas Fluvialba Paraguay S.A y Naviera Conosur S.A, donde manifiestan que el señor Diego Caprano actúa en perjuicio de la flota de las empresas y del comercio binacional, llegando rechazar el arrendamiento solicitado por varias empresas de transporte naval y permitiendo que la flota ubicada en el amarradero de Puerto Pabla Paraguay, se encuentre encalladas el total de sus embarcaciones.
Ambos presidentes de las empresas de PDVSA en la región han dictado medidas judiciales que han afectados a empresas que operan en el Hidrovia, anulando contratos de fletamento vigentes, desconociendo medias de embargo o privilegiando acreedores, poniendo en riesgo la confianza y reputación de PDVSA de manera premeditadas generando grandes costos judiciales, todo esto con la mirada complaciente de las autoridades venezolanas.
Ambas representaciones sindicales coinciden, en que las acciones de los representantes de PDVSA en Argentina y Paraguay, está encaminada a entregar los activos del holding a la comitiva estadounidense que administra la hidrovia con el aval del presiente Milei, convirtiéndolos en colaboradores del Gobierno Norteamericano, incluso llegando a pensar que estas políticas entreguistas, forman parte de un plan ejecutado por el presiente Nicolás Maduro para congraciarse con el gobierno Argentino y lograr su aceptación como ganador de las elecciones presidenciales realizadas en Venezuela.
Al ser consultados directivos de la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina, sobre las operaciones de PDVSA Argentina y Paraguay señalan que estas empresas fueron las únicas operadoras de la Hidrovia que no acataron las alertas meteorológicas de los gobiernos de Argentina y Paraguay, y actualmente en argentina contrataron los servicios de un grupo de abogados libertarios, con la esperanza que el vínculo con el gobierno del presidente Milei ayude en el proceso de entrega de las empresas mediante la obtención de sentencias judiciales encaminadas a tal fin.
Un futuro incierto para PDVSA en la hidrovía
Con más de 200 expedientes judiciales pendientes y sentencias en contra, las empresas de PDVSA en la región enfrentan una quiebra inminente. Mientras tanto, las decisiones de los directivos continúan afectando el comercio internacional y la imagen de confianza en la hidrovía, que se encuentra en su peor crisis operativa en años.
Las acciones de Corredor y Capraro, lejos de ser accidentes aislados, parecen formar parte de una red de corrupción y fraude que podría tener consecuencias profundas para la región y para la integridad de PDVSA, mientras los trabajadores y la comunidad fluvial observan con preocupación cómo se desmoronan los cimientos de una de las rutas comerciales más importantes de Sudamérica con acciones oscuras de un grupo ínfimo de personas que dejan entrever y revelar