Mientras la nación venezolana se encuentra en una intensa campaña electoral donde el Presidente Nicolás Maduro busca su reelección enfrentando a una decena de candidatos, los funcionarios que lo representan en Argentina y Paraguay se alistan ante una posible derrota electoral.
Segun una investigación realizada, existen acuerdos establecidos entre el gobierno del Presidente Milei y los representantes del gobierno Venezolano en la entidad, específicamente los funcionarios, Carlos Corredor presidente de PDVSA Argentina y Diego Capraro Presidente de las empresas propiedad de PDVSA en Paraguay, Fluvialba Paraguay S.A y Naviera Conosur S.A.
El acuerdo contempla entre otras condiciones, que los funcionarios actuarían a favor de la Autoridad General de Puertos de Argentina, dejando que la investigación por abandono de la flota naval perteneciente a PDVSA avance sin obstrucción, pero la realidad ha sido otra.
El holding de PDVSA activó la representación de otro funcionario quien ha estado realizando gestiones a favor de las empresas frustrando así la evolución del procedo de incautación de las embarcaciones, mientras en Paraguay no ha existido resistencia, el abandono de las embarcaciones propiedad de las empresas se mantiene, las acciones a favor de la quiebra de las empresas propiedad de PDVSA se mantiene firme, incluso han generado otras medidas judiciales que favorecen la toma de decisiones de las instituciones involucradas en la toma de las empresas en Paraguay, otro ejemplo es la exigencia de renuncia realizadas al trabajador Ángel Guerra, por el Presidente de Fluvialba Paraguay S.A, señor Diego Capraro, al único trabajador Venezolano que tenía la empresa y que también fue jefe de seguridad de la embajada Venezolana en Paraguay para los años 2018-2021.
El único argumento que esgrimía el Presidente, es la posición política radical que mantenía el ex trabajador a favor de las políticas revolucionarias que dictaba el Gobierno de Nicolás Maduro y la defensa a las empresas de capital venezolano en el territorio Paraguayo situación que está en contra de las medidas que lleva adelante el Presidente Caprano, por lo que generaban gran discrepancia entre ambos, desconociendo que aún existe trabajadores de las empresas que están dispuestos a dar la lucha para evitar que se siga cometiendo abusos de poder y daño al patrimonio de las empresas.
En Argentina la administración del presidente Javier Milei, se encuentra preocupados por el incumplimiento a los acuerdos que ha mostrado Carlos Corredor, al permitir que otros funcionarios de PDVSA actúen en protección de los activos objetos de la investigación, al punto de manifestar que revocaran la oferta de empleo y protección de testigo que le proporcionaron a los funcionarios venezolanos, por ser colaboradores e informantes del gobierno de Estados Unidos de Norteamérica y del gobierno Argentino.
Por ahora solo les favorece que las embarcaciones que se encuentran en Argentina aun yacen hundidas afectando el canal de navegación de la hidrovia, mientras que en Paraguay, la flota de las empresas Fluvialba Paraguay S.A y Naviera Conosur S.A se encuentra desde el año pasado varadas en las adyacencias de Puerto Pabla y en total abandono o desuso, situación esta que está siendo investigada por la Prefectura Naval de Paraguay y por la Fiscalía de Ambiente paraguaya, esperando que en los próximos días procedan a la incautación de la referida flota naval.
