Entre las ciudades de Presidente Franco (PY) y Foz de Yguazú (BR) sobre el río Paraná, se encuentra en etapa final la construcción del Puente de la Integración, cuyo avance general alcanzó 90% y ya se puede apreciar las dovelas que están a punto de unirse en su tramo central.
El sábado pasado se inició la colocación de la última dovela (18) en la margen brasileña de la obra, mientras que en el lado paraguayo quedan pendientes dos de estas estructuras.
A esto se suma una última dovela denominada “La clave” de unos 5,42 metros que se encontrará al centro mismo de la pasarela. De esta manera, el puente está a escasos 41,10 metros de conectarse costa a costa.
Según las estimaciones, la unión completa de la megaestructura se daría antes del mes de setiembre y la culminación total del proyecto tendrá lugar en el último trimestre del año.
Las dovelas son piezas mixtas prefabricadas (metal y hormigón) que dan forma a la calzada del puente. La colocación de estas estructuras comenzó en octubre del 2021, dando comienzo así al denominado avance libre en la zona central del nuevo paso fronterizo. En total deben ser colocadas 37 dovelas metálicas, 18 en cada margen del río Paraná y una en el centro (unirá ambos extremos).
Cada pieza, prefabricada en el cantero de obras, cuenta con un peso de 95 toneladas y un tamaño de 11,90 metros de largo y 19,90 de ancho. La dovela de unión tendrá 5,40 metros de largo y 19,90 de ancho. Las mismas son integradas a la superestructura mediante soldaduras especiales y sostenida por los cabos de atirantamiento; además de ser complementadas con hormigón.
El Puente de la Integración tendrá 760 metros de largo, con un vano central de 470 metros de luz libre sobre el río y más de 60 metros de alto. Esta nueva conexión entre Paraguay y Brasil, la segunda sobre el río Paraná, la financia ITAIPU por USD 84 millones.